OSTEOPATÍA VISCERAL EN MADRID
Y es que muchas personas que padecen problemas de estómago suelen tener otros dolores musculares o procesos emocionales que al final están relacionados.
Esta terapia manual es una rama de la osteopatía, cuya misión es recuperar las membranas y órganos que sujetan toda la zona del abdomen, principalmente.
Por tanto, la osteopatía visceral se ocupa de órganos como el hígado, el riñón o el pulmón, entre otros y, también, de los problemas derivados de ellos: hernia de hiato, colon irritable, disfunciones estomacales y en el duodeno por reflujos, acidez, etc.
Nuestros tratamientos de osteopatía visceral en Madrid, que ofrecemos en nuestro centro ubicado en Móstoles, son capaces de solucionar muchas dolencias del interior de nuestro cuerpo que seguro ni te imaginabas que se pudieran resolver sin pastillas.
Cómo son nuestras sesiones de osteopatía visceral en Madrid
La idea de integrar esta terapia nuestros tratamientos de osteopatía y fisioterapia integral de AFIDAS es porque queremos que nuestros protocolos de actuación sean más completos.
Al fin y al cabo el cuerpo funciona como un todo. Por ello, pretendemos establecer una dinámica de soluciones que aporten curaciones y corrección de disfunciones que desde el sistema interno se proyectan hacia el sistema músculo esquelético y, viceversa.
Es decir, quien se trata de algún problema óseo o muscular también ha de hacerlo a nivel interno con la osteopatía visceral. Y quien tenga algún problema digestivo, posiblemente tendrá dolores lumbares o intercostales, y es conveniente que se trate con la fisioterapia osteoarticular o la osteopatía estructural que tan eficazmente aplicamos en nuestro centro de Móstoles.
Para trabajar esta terapia exclusivamente manual e indolora y, totalmente personalizada, contamos con terapeutas expertos, que complementan perfectamente su labor con al de nuestros fisioterapeutas ciegos.
Beneficios de la osteopatía visceral
La osteopatía visceral está indicada para muchas dolencias y patologías del día a día. Seguro que te sientes identificado con algunas de ellas. Destacamos las más comunes:
- Colon irritable
- Descenso del intestino
- Hernia de hiato
- Otros perjuicios de la mucosa gástrica como digestión pesada, ardor de estómago o reflujo
- Estreñimiento alternado con diarreas
- Vómitos después de haber realizado la digestión
- Dolor en el ombligo también después de las comidas
- Dificultad respiratoria al estar sentado
- Dolores en los músculos y huesos, tanto de la espalda como de las extremidades inferiores, que van y vienen
- Amenorreas, dismenorreas o reglas muy irregulares en general y, también, molestias durante las relaciones sexuales (sólo específico para mujeres)